Postal de papel con flores de magnolia y loto

No es difícil hacer una obra de arte única en casa con un gasto mínimo. Las flores blancas de papel, aunque no estén vivas, tendrán un aspecto fresco y tierno tanto en una foto como en una postal. Sólo su fantasía puede limitar las opciones de composición y su diversidad.

Materiales y herramientas:

• papel de impresora;
• papel creativo (restos de papel pintado);
• cartón fino o papel de álbum;
• tijeras normales y tijeras de manicura;
• marcador de color;
• Pegamento PVA.

1. Para hacer una flor de magnolia blanca, dobla 2 veces por la mitad un trocito de papel blanco. En este caso obtendrás 4 pétalos idénticos a la vez.

2. Recorta pétalos redondeados como una magnolia blanca. Véase la foto.

3. Haz un pequeño corte en el lugar previsto donde se fijará el pétalo a la base. Pega ligeramente una de las piezas cortadas. Pega las dos piezas para que el pétalo tenga volumen.

4. Para hacer una flor de loto, dobla 3 veces por la mitad un trocito de papel blanco. En este caso, obtendrás 8 pétalos idénticos a la vez. Recorta más pétalos oblongos y ligeramente puntiagudos. Para la flor de loto, necesitarás algunos pétalos más: 1,5 y 2 veces más pequeños.

5. No se recomienda formar la flor en el cuadro o la tarjeta de una sola vez. Se puede utilizar un círculo de un tamaño adecuado de papel blanco para formar una flor aparte.

Pega los pétalos en las bases para que formen flores. Cuando estén secas, recorta los bordes que sobresalgan de la base.

6. Ahora pasamos a formar los núcleos de las flores. Recorta rectángulos de papel del tamaño deseado. Haz varios cortes en un lado para formar un fleco. Aprieta ligeramente el flequillo entre el pulgar y las tijeras, y tira de las tijeras para atravesarlo. A continuación, retuerce el flequillo formando tubos con rizos hacia fuera (también se creará un bonito núcleo de flor si retuerces el flequillo con rizos hacia dentro). Ahora pega los núcleos dentro de las flores. Si lo deseas, puedes colorear el núcleo o dejarlo completamente blanco.

7. A continuación, necesitarás una base para la composición final. Puede ser una postal, un cuadro o un 2 en 1 (postal a una cara). Para una postal de dos caras, coge una cartulina fina o papel de álbum de forma rectangular, así como papel para creatividad (papel pintado, amontonado accidentalmente en casa) del mismo tamaño.

8. En el papel para creatividad (papel pintado) marca el centro, y en una de las mitades recorta un rectángulo (cuadrado) para hacer un marco para la futura composición. Pega el marco a la base de la tarjeta.

9. Pase a la formación propiamente dicha de la composición. Coloca las flores aproximadamente donde deben estar. Pega las partes en último lugar, cuando toda la composición esté lista. Si crees que las flores parecen solitarias sin hojas, añádelas. Aquí tampoco estarán de más tus habilidades con el quilling. Los giros añadirán picardía y sofisticación al conjunto de la imagen, y también ayudarán a crear una rama similar para la flor. ¿Está completa la imagen? Entonces puedes pegarla.